Se destacan las formas redondeadas del sofá Igarapé, armonizando perfectamente con la esencia del ambiente sofisticado y acogedor.
Cada pieza es cuidadosamente elegida, el uso de texturas y la iluminación suave crean una atmósfera casi escénica.
El toque sostenible, representado por la reutilización del suelo de parquet de madera de otra obra del arquitecto, es un auténtico ejemplo de reverencia hacia nuestras raíces y hacia nuestro planeta, nuestra gran casa.